A travéz del tiempo los soportes en los cuales se manifestaba la escritura han evolucionado. Empezó en Mesopotamia con planchas de barro, en donde se hacían dibujos. Tiempo después, en Egipto, usaron el papíro de diferentes longitudes, pero tenía la desventaja que se hacia sobre madera, y con el paso del tiempo y la humedad se desasía. El pergamíno sustituyó al papiro debido a que se podían organizar en códices que tenían pasta de madera, algunos incluso con joyas incrustadas. Esto provocó que sea considerado un artículo de lujo que solo podían poseerlo los Monarcas o la Iglesia, que trajo como consecucencia que solo un reducido grupo de personas sean alfabetas. Con la aparición de la imprenta, gracias a Gutenberg, el libro se masificó y pudo llegar a toda la población, gracias a su menor costo.
Pero no solo pasaron a la historia los cambios en dichos soportes, sino también los escritos que se hicieron en aquella época, tales como la Bíblia, la Odisea, El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha o aquellos después de esta, como lo son las obras de Shakespeare - que me sorprende que tenga una sección propia en la lista de los libros que debe leer toda persona - Oliver Twist, Alicia en el país de las maravillas o el conocidó joven mago Harry Potter, que muchos hemos disfrutado leer.
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